Los pies necesitan cuidados todo el año, no solo en verano. Recuerda hidratarlos con cremas específicas para cubrir todas sus necesidades
Las callosidades en los pies son comunes en la mayoría de las personas, y generalmente se deben a la utilización de calzados poco adecuados, debido a la fricción constante de estos contra las zonas como el talón, dedos, planta del pie y la región donde se producen los llamados juanetes.
Los callos en realidad se forman para proteger a tu piel de lesiones, por eso aparecen en aquellas zonas sometidas a mucha fricción.
Si no los eliminas pueden generarte dolor e incluso sangrado con riesgo de infecciones. En los diabéticos es de extrema necesidad un correcto cuidado de los pies, pues una herida a causa de la lesión de un callo puede generar infecciones peligrosas.
Ten en cuenta que en la diabetes la falta de buena circulación en las extremidades dificulta los procesos curativos de heridas, siendo este grupo de personas más susceptibles y vulnerables. Por eso, si te encuentras dentro del grupo de personas que sufren diabetes, no dejes pasar por alto ninguna lesión que aparezca en tus pies.
Aparte del problema de circulación, también sufren pérdida de sensibilidad, por lo que deben ser habituales las revisiones en busca de cualquier herida o lastimadura.
A continuación presentaremos ciertos consejos que ayuden a prevenir o minimizar la aparición de callosidades en los pies, así como también remedios naturales que ayuden a eliminarlos.
Consejos…
- No utilices zapatos de tacón o los que sean incómodos por mucho tiempo, y menos para caminar largos trayectos con ellos.
- Siempre ten a mano algún zapato cómodo de recambio en caso de caminatas imprevistas.
- Hidrata tus pies, no olvides esta zona tan sufrida en nuestro día a día y dale los cuidados que requiere, cada 1 o 2 semanas sumerge tus pies en agua tibia, y puedes valerte de una piedra pómez para suavizar las callosidades.
- No es recomendable utilizar aquellos elementos que cortan los callos, pues la región que se encuentra por debajo es muy delicada y te podrías producir heridas, si lo haces y cortas la piel por debajo puedes sufrir infecciones que sólo agravarán tus dolores y molestias. Si tus callos son muy prominentes y molestos la mejor opción es acudir a un podólogo, quién ayudará a eliminarlos sin riesgos de mayores lesiones.
- Las cremas que utilices para hidratar tus pies deben ser específicas para la zona, en el mercado encontramos gran variedad en cuanto a marcas y precios. Las cremas corporales pueden no cubrir los requerimientos de la piel de los pies.
- Evita usar medias con costuras gruesas que aumenten la fricción en zonas específicas, mejor utiliza aquellas que sean lisas y de preferencia de algodón. Las medias de algodón además evitarán que tus pies permanezcan húmedos y así prevenir la aparición de hongos.
- No hagas como la mayoría que olvidan a sus pies en invierno y sólo les dan importancia en verano cuando tengan que exponerlos. Ellos necesitan de cuidados todo el año.
- Serían útiles también las almohadillas protectoras para evitar el roce del calzado con zonas específicas de tus pies.
Remedios caseros para los callos
Numero 1
Primero debes colocar tus pies en remojo durante al menos 10 minutos en agua tibia, retira tus pies del agua para colocar sobre tus callos el resultado de la mezcla de una cucharada de bicarbonato de sodio más un poco de agua, al colocar realiza un suave masaje para luego pasar una piedra pómez.
Número 2
Realiza una infusión de cuatro cucharadas de manzanilla en un litro de agua, remoja tus pies en dicha infusión. La manzanilla ayudará a aliviar las molestias y a suavizar la piel endurecida.
Número 3
Corta una rodaja de limón, colócala sobre la zona donde tienes el callo, sujeta la rodaja mediante alguna venda y deja actuar durante la noche.