Las personas con pieles grasas producen más cantidad de cebo, que obstruyen los poros y les hacen perder la elasticidad, lo que finalmente hace que los poros queden abiertos. También pueden estar causados por una incorrecta limpieza de la piel, por ejemplo, por no quitarse el maquillaje antes de dormir.
Algunos remedios caseros para los poros abiertos son:
Diariamente colocaremos pulpa de tomate en el rostro y la dejaremos actuar durante cinco minutos. También puedes usar pulpa de papaya
Si calentamos la clara de un huevo con un poco de jugo de limón durante 20 segundos, esperamos que se enfríe y lo aplicamos por la cara, lograremos un cambio notable.
Frotar cubos de hielo -con suavidad- por la cara ayudará a minimizar los poros también.
Una mascarilla de harina y agua un par de veces a la semana hará que luzcamos unos poros más cerrados.
Otra mascarilla ideal es la de levadura de cerveza con agua. La dejaremos en el rostro 12 minutos y limpiaremos con agua fría. Debe realizarse una vez por semana.
Otra opción es la combinación de miel y yogur, que dejaremos por 25 minutos y luego lavaremos con agua fría.
Si tenemos la piel seca o normal, podemos hacer una mascarilla de 2 cucharadas de cuajada y una de harina de garbanzo y la dejamos en el rostro por 20 minutos. También podemos utilizar jugo de tomate con miel.
Luego de la limpieza habitual del rostro, debemos usar un tónico astringente como el hamamelis, el jugo de limón o las rodajas de pepino.
La exfoliación es un paso muy importante para limpiar los poros, y de esta forma, ayudar a que se cierren. Se puede utilizar azúcar, harina de maíz o canela.
Cambiar la alimentación, incluyendo grandes cantidades de alimentos antioxidantes, como bayas, verduras de hojas verdes, consumir bastante fibra y estar bien hidratado.
Proteger la piel del sol también evitará que los poros se abran.
Estos remedios caseros para los poros abiertos nos ayudarán a tener una piel más limpia, suave y con un aspecto radiante.