Resulta aún más fascinante lo que puede expresar el cuerpo de un ser humano mientras duerme junto a su pareja, ya que en las horas de sueño el pensamiento subconsciente es el que predomina, haciendo que el lenguaje corporal sea mucho más claro y preciso, expresando cosas que no somos capaces de manifestar cuando estamos despiertos.
De la misma manera, el estado de una relación se puede interpretar partiendo de la posición natural que adoptan los cuerpos de la pareja al dormir, según una investigación publicada en el sitio Little Things.com. Según los expertos en sicología de la pareja, hay 10 posturas básicas durante el sueño, a partir de las cuales se pueden determinar diferentes aspectos en la relación.
Dime como duermes en pareja y te diré como es tu relación.
1. La cuchara
Esta postura, adoptada por el 18% de las parejas, demuestra que uno de los miembros asume una actitud protectora sobre la otra. Es una posición tanto tierna como sexual, en la que se expresa mutua confianza principalmente al inicio de la relación. “Yo confío en ti“.
2. La cuchara floja
Cuando la relación ha madurado un poco más, el contacto físico en la cama se reduce durante el dormir y la pareja asume una posición más cómoda, como una gran cuchara en la que se expresa “Estoy a tu espalda, puedes contar conmigo”.
3. La persecución
Es similar a “la cuchara”, pero una de las personas esta retraída hacia un lado de la cama, como si la otra la persiguiera. Puede significar que uno de los dos quiere ser buscado o quiere hacerse el difícil, también podría ser un caso de “cuchara ilegal” en el que las personas manifiestan que quieren “más espacio”.
4. El nudo
Es la posición más intima para dormir, esta es la alternativa menos común a la Cuchara y tiende a ocurrir en los periodos en que los sentimientos son más intensos, como después de hacer el amor o en el comienzo de una relación. Algunas parejas la mantienen a lo largo de su relación, pero, de acuerdo con Elizabeth Flynn Campbell, una psicoterapeuta de Nueva York, la pareja podría ser demasiado dependiente el uno del otro.
5. El nudo suelto
Esta posición comienza con “el nudo” pero después de 10 minutos la pareja se separa un poco. Sólo el 8% de las parejas adoptan esta postura la cual indica una relación más sólida que “el nudo”, expresando un compromiso entre intimidad e independencia para el bienestar mutuo.
6. Los amantes de la libertad
Cuando una pareja duerme dándose la espalda, contrario a lo que se podría pensar, la postura indica algo positivo. Según los expertos, las parejas que duermen en esta posición sin tocarse, están muy conectadas y seguras de sí mismas en una relación que mezcla cercanía e independencia.
7. Los toca espaldas
La postura en la que las parejas duermen dándose la espalda pero se tocan la una con la otra o a través de los glúteos, también indica algo positivo. Es señal de que la pareja está en una relación confortable, donde el uno se siente muy a gusto con el otro. Esta postura es más común en relaciones que superan un poco más del año de duración que en aquellas de tiempo más prolongado
8. El abrazo con cabeza y hombros
En las relaciones tempranas o aquellas resurgentes, es común ver esta postura en la que uno de los dos recuesta su cabeza sobre el pecho de la otra mientras entrelazan sus piernas. Esta forma de dormir indica un nivel muy elevado de confianza en la pareja, en la que además hay fortalecimiento mutuo, camaradería y protección. La psicóloga Shirley Glass escribe; ”La posición fortalece el sentimiento de compañerismo y seguridad”.
9. El abrazo de pierna
Cuando la pareja suele juguetear con los pies de la otra o entrelazar sus piernas, esto puede indicar que están ansiosos por una conexión emocional o sexual y buscan intensamente saciarse en uno con el otro, incluso cuando duermen. Son de aquellas parejas en las que uno termina las frases del otro y se cuidan mutuamente.
10. El acaparador de espacio..
Si en la pareja alguno toma la postura de “estrella de mar” extendiéndose por toda la cama, esto puede indicar una tendencia egoísta, en especial cuando el otro es empujado al borde de la cama. Es una expresión de una relación en la que uno domina el espacio mientras el otro tiene un rol secundario.
Por último, la posición de la cabeza de los dos al dormir también puede indicar quien domina. Si la cabeza de uno tiende a estar cerca del tope superior de la cama, este es quien domina, pero si las cabezas por la general están niveladas es un buen síntoma de igualdad en la relación.
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