Pero meses más tarde, sus planes a futuro pronto obtuvieron un final verdaderamente desagradable que fue noticia en muchos lados.
Y es que justo un día después de que Shelby cumpliera años y la pasara genial con su hija y pareja, hizo una llamada de emergencia informando que su casa estaba en llamas. Un accidente había ocasionado un incendio amenazando con la vida de la madre y la hija que ahí se encontraban.
Los bomberos en minutos llegaron y vieron la terrible escena: la casa estaba toda incendiada y algunos escombros yacían por todos lados.
Estos lo primero que hicieron fue apagar el fuego a la misma vez que buscaban a las personas que estaban adentro, es decir, a Shelby y su pequeña.
Muy pronto encontraron a Shelby en la segunda planta totalmente muerta por envenenamiento de monóxido de carbono. Algo lamentable.
Justo después dieron con el paradero de la pequeña Keana enfrente de la casa y adentro de un asiento de niños. Rápidamente la llevaron al hospital.
Horas más tarde supieron toda la situación. La madre en su último intento de salvar a su hija, la metió al asiento donde fue encontrada y la lanzo por la ventana pudiendo así salvarle la vida porque fue la única que sobrevivió a tal accidente.
En el hospital le hicieron chequeos a Keana y estaba ilesa, por lo que en los días posteriores pudo ser entregada a los familiares que gracias a distintas campañas de recaudación, pudieron obtener dinero para hacerse cargo de aquella niña que resultó sin peligro alguno por tener una madre que claramente amaba mucho a su hija.
Nos queda claro como madres son capaces de todo para salvar a sus hijas, pues aparte de este suceso hay muchos más por ahí que son parecidos.
